Y aquí está el primero de todos, y la mamá de todos los que llegaron después...
En cuatro años mis pajarillos dulces han ido evolucionando, aunque siempre con la esencia de eso que los hace únicos...
Esté modelo es de los últimos que han salido de mi taller con olor a té ;)
Fueron un encargo muy especial para Sofía y su mamá, por ello utilice los mismos colores en ambos, para representar esa conexión mágica que existe entre una madre y una hija...(que ñoñas nos ponemos las mamás)
Una vez más mi elección fueros los tonos pastel que tanto me gustan y que le dan un toque dulce y romántico...
Un besito muy dulce!!
1 comentario:
Son preciosos, yo estoy encantada con el mio y lo uso muy a menudo!
Un besote
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